Kräutergarten am Hammerpark
Un pequeño jardín de especias en Hamburgo acoge a una higuera mística
En uno de los bordes del Hammerpark asoma una higuera altísima rodeada de salvia, romero, oregano, milenrama, albahaca y un hotel de insectos que hace las veces de pizarrón vecinal. Se trata del Kräutergarten (el jardín de las especias), cuyo frescor se entremezcla con la humedad de la ciudad portuaria de Hamburgo, la más grande del norte de Alemania.
Brotes bajo la higuera del Kräutergarten y algunos destellos otoñales. Las especias que la rodean se encuentran a disposición del visitante, quien debe cosechar de forma medida para que haya suficiente para todos.
Las 16 hectáreas del Hammerpark cumplen diversas funciones: aquí se hace mucho deporte, los niños tienen acceso a cubiles para jugar, semanalmente se lleva a cabo una bioferia con productos regionales y de estación. En medio de eso, el Kräutergarten se presenta más bien como un espacio que invita al ensimismamiento meditativo y al diálogo franco con algún otro visitante respecto de cómo sacarle el mejor provecho culinario a las especias que pueblan las camillas del jardín.
La biografía del Kräutergarten muestra un desarrollo pendular: ha tenido épocas de mucha actividad vecinal plasmada en el cuidado comunitario y en las lecciones sobre sensorialidad culinaria, pero también fases de inercia –no siempre es fácil hallar voluntarios regulares– que se traducen en follajes altísimos que cubren a la salbia y al orégano hasta invisibilizarlos, o en el deterioro del hotel de insectos.
Brotes de orégano en el jardín de las especias como ejemplo de crecimiento algo salvaje, pero armónico.
El jardín tuvo en el colectivo "Hamm' wir alles" un apoyo constante entre 2011 y 2018. Los escolares podían venir y reconocer ciclos vitales en medio del vecindario. También personas mayores de un albergue cercano tenían la oportunidad de experimentar un paseo calmado en medio de este oasis de tranquilidad.
Aún así, el futuro de este jardín se ve prometedor: el ayuntamiento del distrito ha dispuesto una inyección financiera para rehabilitar el Insektenhotel y un grupo de vecinos cuidará las camillas de especias. Cualquier persona puede venir y cosechar algo de salvia para calentar el espíritu con una infusión –los inviernos glaciales y húmedos de Hamburgo son siempre un buen pretexto– o reposar bajo la copa de la higuera.
De hecho, este majestuoso ejemplar de ficus carica constituye por sí sólo un buen motivo para dedicarle una visita a este discreto jardín. De notable altura (siete metros), esta higuera le da una prestancia inusual a este especiario urbano del norte alemán (los higos prosperan sobre todo en climas más soleados), ofrece refugio cuando llueve y despide aromas mediterráneos durante el verano. Los vecinos del barrio de Hammerkirche, hogar del Kräutergarten, pueden enorgullecerse de tener esta compañía.
La higuera del Kräutergarten, con sus siete metros, debe de ser de las más altas de toda Europa. Una demostración que este aguerrido árbol también puede desarrollarse en los climas fríos del Norte.
* * *
Kräutergarten am Hammerpark
Caspar-Voght-Straße, 20535, Hamburgo
Llegada: con las líneas U2 y U4 (parada en la estación de Hammerkirche).